Inició con la fascinación por la magia y la existencia de mundos invisibles, me inspira demostrar que los
diferentes gustos crean un público para cada cosa en el mundo y que se nos ha implantado una
creencia de belleza muy subjetiva, la cual es un reto al crear duendes bizarros y hadas grotescas o
leyendas locales que retan la normalidad.
Siento compasión, pienso en cuantas personas verán la belleza intrínseca en ellos y cuántos verán la
superficial y abstracta forma de sus formas, siento sus personalidades traviesas floreciendo, como
eligen cada detalle desde la piel hasta la ropa, y como a veces, no se quieren ir de mi lado.
Me deja satisfecha cuando alguien encuentra a su personaje y se enamora de su esencia, lo entiende
y lo acoge en su hogar como si lo estuviera esperando, cuando compartimos la conexión.
A la vez me emociona incursionar en el mercado del folklor costarricense fusionando historias de
antaño y de actualidad, demostrando la magia existente en diferentes personajes, combatiendo el
prejuicio de que la magia o la belleza abstracta son demoniacas o dañinas. Propongo llevar buena energía
desde una óptica diferente.